energía después de Fukushima, La
En su libro sobre Fukushima Cristina Narbona y Jordi Ortega se atreven, tras el desastre a pronosticar el futuro de la energia nuclear que no tendrá nada que ver a como la conocemos en la actualidad.
Este libro ve la luz cuando aún se desconoce la magnitud de los efectos de la catástrofe nuclear de Fukushima. Nada extraño, si se tiene en cuenta que todavía no podemos evaluar las consecuencias del accidente de Chernóbil (1986), porque ni siquiera han llegado a nacer todas las personas cuyas vidas estarán marcadas por él. Lo sucedido en Fukushima demuestra que puede ocurrir algo que era considerado hasta ahora prácticamente imposible por quienes defienden la energía nuclear: un accidente muy grave en un país que se cuenta entre los más avanzados del mundo desde el punto de vista tecnológico y de la seguridad. Un hecho semejante afecta, en particular, a la percepción social del riesgo nuclear.