Una ley agraria para Bengala
«Una ley agraria para Bengala» es uno de los trabajos más relevantes del principal historiador de los estudios subalternos, Ranajit Guha.
Entre las décadas de 1750 y 1760, Inglaterra aseguró su dominio sobre la India. La provincia más rica, Bengala, perdió en poco tiempo su antiguo esplendor, sepultada bajo el gobierno y el monopolio de la Compañía de las Indias Orientales. En este volumen, Ranajit Guha analiza las propuestas de una nueva generación de gobernantes; presenta un minucioso estudio sobre la genealogía y las contradicciones de sus ideas y prejuicios, basados en las principales corrientes del pensamiento inglés y francés de la época.
El documento definitivo del primer colonialismo británico fue una ley agraria que otorgaba la propiedad permanente de la tierra a la nobleza local. Esta ley fue defendida desde presupuestos mercantilistas, después fisiócratas y al fin como política de empresa capitalista. Sin embargo, el pensamiento ilustrado eurocéntrico, tan caro a la aplicación de principios generales, fue incapaz de considerar las diferencias entre el feudalismo europeo y el indio, la gentry inversora y los zamindares indios, entre los derechos que la propiedad confería en un lugar y otro.
Como si de un espejo invertido se tratara, Guha nos devuelve la imagen de las principales corrientes económicas europeas. Apoyadas en su pretensión universalista, éstas sirvieron en la práctica para articular una organizacion neofeudal en Bengala, para integrar y reproducir elementos precapitalistas en un régimen colonial impuesto por el expansivo imperio británico. El emergente capitalismo industrial ya tenía un plan para la India y ésta se convirtió a lo largo del siglo XIX en una inmensa reserva agrícola.